En lo más profundo de cada una de nosotras se hayan estas tres cualidades, entre muchas otras más.
Quiero que aprendamos a aprender, a crecer, a integrar y a soltar determinadas cosas del mismo modo que albergamos las nuevas. Soltar sin recoger no tiene sentido. Recoger sin soltar…menos.
Ser 𝗳𝘂𝗲𝗿𝘁𝗲 es sostener (nos)
Es ser vulnerable cuando hay que serlo, e imperturbable cuando así se requiera.
Ser 𝗹𝗶𝗯𝗿𝗲 es ser salvaje y fuerte y viceversa. O al menos yo lo siento así.
Una vez leí que ser fuerte es vivir de forma activa tu naturaleza, sin importarte ante quién o qué estés.
Puede que esta libertad consista únicamente es escucharte de verdad, en sentirte, en observar qué te resuena…y abrazarlo y vivirlo sea lo que sea.
Abrazarlo y abrazarte, con tus luces y sus sombras. Con todo. Todo suma.
Esta forma de vida me parece la 𝗺𝗮́𝘅𝗶𝗺𝗮 𝗲𝘅𝗽𝗿𝗲𝘀𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲 𝗹𝗶𝗯𝗲𝗿𝘁𝗮𝗱 con la que contamos y tenemos la opción y el derecho a ella.
Como seres humanos, como 𝕞𝕦𝕛𝕖𝕣𝕖𝕤, como individuos aislados y por supuesto como manada, todas 𝕛𝕦𝕟𝕥𝕒𝕤.
Seamos manada, lobas, mentes que busquemos juntas nuestra esencia y libertad. Busquemos un espacio sagrado donde cuidarnos, donde vivir, donde gritar, donde buscar ese ser.
𝗗𝗢𝗡𝗗𝗘 𝗦𝗘𝗥.
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🍃 He tardado siglos en subir esta foto porque a pesar de que me encanta, me daba mucho reparo y hoy una gran amiga me ha hecho ver la importancia de liberarnos de juicios, prejuicios e ideas erróneas y de ser más libres…y eso, me ha llevado a subirla…y a escribir este texto.
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A todas las mujeres libres y salvajes que me rodean, acompañan, apoyan y dan la vida…que son muchísimas. Os amo fuerte ❤